Mi niña bonita de piel rosada
Y tersa, hoy brillas como escarlata
Tus pequeñas uñas de hojalata...
Mary, ¡ya estás toda colorada!
Deja ya esas manos incansables
No pidas que me calme, pequeñita
No ubico tu tersa toallita
Tu dolor y el mío son inagotables.
Ven, recoge tu ropa, mi tesoro
Vamos juntas al mar que más te gusta
Escucha las aves cantar a coro.
Olvida todo lo que te disgusta
Juguemos con el cariñoso loro
No seas contigo misma injusta.